A petición del centro, nuestra alumna Marcela Ferrándiz García nos cuenta cómo está resultando su estancia en Canadá con la beca de la Fundacción Amancio Ortega:

PRIMER MES EN CANADÁ

Ya llevo un poco más de un mes en Edmonton, una ciudad de un millón de habitantes en Alberta, Canadá, y la verdad es que no ha sido un mes nada fácil, todo aquí es distinto, el instituto, el idioma, tu casa y tu familia. Pero poco a poco me voy acostumbrando a la vida canadiense, sobre todo al frío, que en el tiempo que llevo aquí ha nevado tres o cuatro veces y las temperaturas no hacen más que bajar cada día más y más.

En el instituto todo es diferente, el curso se divide en dos semestres y en cada uno tienes unas asignaturas diferentes, en el primer semestre tengo matemáticas, historia, francés, liderazgo y banda, y en el segundo tengo, biología, inglés, cocina, banda y liderazgo.

Mi instituto es muy grande y hay mucha gente, lo bueno de mi colegio es que organiza muchas actividades para los estudiantes, por ejemplo en marzo organizan una actividad que consiste en estar 24 horas en el instituto y durante ese día hay que tener funcionando bicicletas estáticas sin parar y la gente se va rotando, y mientras tanto en el resto del instituto hay actividades como guerra de pistolas láser o una sala con perros o animales exóticos.

Para los canadienses el instituto es muy importante, por eso se esfuerzan en que el suyo sea el mejor, en cuanto a deportes sobre todo, por ejemplo hay una actividad que la llaman Fanpede donde todo el instituto va a animar a nuestro equipo de fútbol americano al campo del otro equipo.

Los profesores también son diferentes, se involucran en muchas actividades extraescolares y a los alumnos muchas veces nos tratan más como amigos que como alumnos.

En cuanto a mi familia, es una familia muy grande, los padres, dos niños, una niña, una estudiante de Japón y yo. La familia es una parte muy importante, porque en todos los problemas que he tenido me han ayudado y puedo hablar con ellos de lo que sea porque entienden perfectamente cómo me siento. 

Marcela Ferrándiz García

(Alumna de 1º  de Bachillerato y becaria de la Fundación Amancio Ortega)